viernes, 2 de octubre de 2009

¡En recuerdo de Julián el día de su jubilación!

Julián, tu sabiduría lo es todo,
tu bondad es infinita.
La enseñanza es a tu modo
y de seguro es muy bonita.

Tú enseñas sin cansarte,
al que te pide enseñanza
aunque tengas que complicarte
siempre hay alguna esperanza.

Tú no haces diferencia
entre unos y otros.
Esa es la gran huella
que dejas en todos nosotros.

Tú que nos enseñaste,
que nos diste tu amistad.
Tú que nos respetaste
con una gran igualdad.

Hoy que tu carrera termina,
para otra etapa comenzar.
Nos dejas con una espina
no te vamos a olvidar.

Te hemos llegado a querer
como a un segundo padre.
Tú que nos viste crecer
y ha sido algo inolvidable.
Gracias Julián